La última moción de Unidas Podemos al pleno del Ayuntamiento de Ciudad Real sobre los silos del trigo vuelve a ser insuficiente en su planteamiento, improductiva para la ciudad, ineficaz para los fines que pretende, prescindible totalmente por su escaso y corto planteamiento y además oportunista en el tiempo. No ha servido ni para provocar el debate político de que hacer en la ciudad con la docena de edificios públicos cerrados y abandonados en condiciones similares a cómo están los silos del trigo. Pero además, ha quedado demostrado que ninguno de los partidos con representación municipal tiene un criterio definido y estudiado de para qué pueden servir. Todos quieren restaurarlos y adecentarlos, por fuera, lavarles la cara para acabar con la vergüenza que supone mantenerlos en el estado actual, pero ninguno tiene idea de qué hacer con unos edificios de esas características y a que se pueden dedicar.
En esta ciudad parece que no servimos ni para copiar lo que hacen con edificios industriales en otros puntos de España y de Europa. Antiguos tinglados de puertos, muelles de carga de estaciones de ferrocarril, antiguas fábricas industriales y naves con especiales características constructivas han sido reconvertidos a proyectos de ocio, gastronomía, artesanía, etc., que combinadas con otras de carácter cultural hacen del espacio industrial reconvertido un lugar de trabajo, de ocio, de diversión, de creación de empleo y de intercambio cultural que da valor añadido a la ciudad y sirve de punto de referencia para el turismo. Han realizado reconversiones del espacio sostenibles económicamente en el tiempo.
Esta moción es la prueba irrefutable de que sus ponentes están fuera de la realidad y por ello perdieron la mitad de su capital político en las últimas elecciones. La dedicación de los silos a una fábrica cultural o al asociacionismo parece ser el único recurso de Izquierda Unida para los edificios abandonados de la ciudad: Cruz Roja, antigua casa de cultura, silos del trigo, etc. por nombrar solo algunos de la larga lista. Todas las propuestas de esta partido giran en torno al mismo fin. Espacios públicos, para uso público, con personal público y presupuestos públicos para fines culturales, y como no, con la idea siempre de cederlos a terceros gratuitamente. Como si no hubiese mil necesidades en la ciudad donde destinar los escasos recursos municipales. Pero tampoco quienes gobiernan tienen claro cuál es el norte y se quedan en lo estético, que aunque tampoco sirve para nada puede dar algunos votos. La respuesta del equipo de gobierno, mediante la Sra. Torralbo, a Unidas Podemos, es el reconocimiento de no saber qué hacer con ellos por parte de quienes han sido elegidos para estos dos próximos años. ¿Y qué decir de la oposición y de los socios en el gobierno? Pues eso….., que al final más de lo mismo.
Las catedrales de la arquitectura industrial del siglo XX, como las llama la concejal de urbanismo pueden y tienen que dedicarse, como cualquier otro edificio público de la ciudad en condiciones similares, a la creación de empleo, a la creación de espacios que sean el motor de desarrollo de actividades, a la ubicación de empresas, a centros de formación de actividades autóctonas, agrícolas, artesanas, de la provincia y de la región. Al escaparate de emprendedores que dedicados a la pequeña producción encuentren un lugar donde aprovechar sinergias y compartir experiencias. A la creación de espacios que generen ingresos y que dispongan de recursos tecnológicos que aporten valor añadido a sus usuarios, etc.
Todo edificio público de la ciudad que actualmente este cerrado tiene que tener un plan de usos y actividades para la creación y generación de empleo, bien mediante la explotación directa por empresas privadas o mediante la gestión pública. Es necesario priorizar las necesidades de los ciudadanos y hoy la primera necesidad es el empleo. Es necesario poner las bases de cara a la nueva generación de autoempleo y a las nuevas profesiones porque el futuro de la ciudad, como del resto de pueblos de la provincia, es incierto. Los jóvenes se marchan fuera por falta de oportunidades laborales y el paro sigue aumentando.